Ventajas e inconvenientes del portafolio escolar

Con cada uno de los cursos que he realizado en el INTEF,  junto a docentes que, en su mayoría, imparten materias en el sistema educativo español, me hago más consciente de las grandes diferencias que existen entre dicho sistema y el que yo estoy inmersa actualmente, el rumano.

Disfruto mucho con estos intensos cursos pero en muchas de las ocasiones los aspectos que se tratan para mí solo pueden formar parte de la teoría ya que dadas las circunstancias del sistema educativo rumano, en general, y del centro en el que trabajo, en particular, no puedo ponerlas en marcha. O, al menos, no al 100% como se persigue con estos cursos formativos. Digamos que voy haciendo algunos pinitos.

Encuentro, como la mayoría de los docentes, muchas ventajas y pocos inconvenientes pero estos hacen inviable el poder usar esta herramienta por ahora en mi materia con todos y cada uno de los alumnos.

Por un lado, el portafolio como recopilación de reflexiones y análisis de las evidencias del trabajo realizado a lo lardo de un curso escolar cuenta con las siguientes ventajas:

1.  Desarrolla la capacidad de autocrítica y reflexión.
2.  Permite que el alumnado sea consciente de su proceso de aprendizaje, de su evolución y de los aspectos en lo que puede mejorar.
3. Fomenta la implicación del alumnado en su propio proceso de aprendizaje por lo que es un sujeto activo y comprometido.
4. Hace visible el trabajo realizado por lo que puede ser aliciente para la motivación, la creatividad, la mejora,…, ya que posteriormente va a ser público y nos gusta que se valore nuestro trabajo.
5. Es un proceso largo por lo que se fomenta la constancia en el trabajo.
6. Permite la autoevaluación y coevaluación por lo que favorece el trabajo colaborativo.
7. Permite cambiar y combinar los roles de docente y aprendiente ya que todos aprendemos de todos.
8. Excelente herramienta para cultivar la competencia “aprender a aprender”.
9. Integra conocimientos de diferentes materias por lo que implica que haya coordinación entre docentes lo que favorece nuevas metodologías de enseñanza y aprendizaje.

Por otro lado, como ya he comentado, yo me encuentro con algunos inconvenientes, no tanto del portafolio en sí sino de las circunstancias que me rodean en mi trabajo, que no facilitan poner en práctica esta herramienta. De esta forma algunos inconvenientes son:

1. Requiere de que todo el alumnado tenga internet en sus casas para poder trabajar en él fuera del horario escolar y esto no es posible.
2. Para solventar el anterior problema se podría contar con la hora de informática semanal que tienen los alumnos pero esto requiere coordinación entre docentes y esto aún es una utopía. Hay dos salas de informática ocupadas durante todo el horario escolar por lo que tampoco se puede coordinar.
3. Dados los dos anteriores inconvenientes la actividad solo podría tener un carácter voluntario y en ese caso…es probable que como mucho cinco alumnos de los treinta y dos que hay de media en las aulas se animasen a trabajar en ello.
4. Requiere de mucho tiempo, dedicación y constancia que no siempre se tiene por lo que es probable que las evidencias no cubran todo el curso escolar o que no se haga el debido análisis crítico y reflexivo, por lo que pierda la esencia del portafolio.
5. No evalúa conocimientos sino procedimientos y procesos por lo que se debe complementar con otras formas de evaluación lo que las evaluaciones requieren de mucho tiempo.
6. Requiere formación, implicación, cooperación entre docentes y esto no siempre es posible.

Aunque me repita, para mí, el aspecto más destacado y la esencia del portafolio, tanto del docente como del alumnado, es el análisis crítico y reflexivo que el aprendiente debe hacer de las diferentes evidencias que muestra de su trabajo. Este aspecto es la gran aportación del portafolio el proceso de enseñanza y aprendizaje actual. Se fomenta que el alumnado sea consciente del mismo, se implica como sujeto activo que es del mismo y actúe en función de sus intereses, sus capacidades y habilidades. Además permite que vea el curso escolar, la educación en mayúsculas, como un ente único e integrador de todos los conocimientos.